Logrando un hito importante en la lucha contra la malnutrición global, los países acordaron hoy políticas destinadas a garantizar que las personas de todo el mundo tengan acceso a una alimentación más saludable.
Tras una serie de intensas negociaciones, los representantes de los países miembros de la FAO y la Organización Mundial de la Salud (OMS) alcanzaron consenso sobre una declaración política y un marco voluntario de acción que incluye más de 50 recomendaciones.
«El acuerdo sobre el Marco envía una poderosa señal al mundo: los países miembros se toman realmente serio el tema de la nutrición», aseguró el Director General de la FAO, José Graziano da Silva, al valorar la iniciativa.
La Declaración y el Marco de Acción serán aprobados en la Segunda Conferencia Internacional sobre Nutrición (CIN2) que se celebrará en Roma del 19 al 21 noviembre de 2014. Esta reunión intergubernamental de alto nivel está organizada conjuntamente por la FAO y la OMS.
Graziano da Silva citó datos recientes de la FAO que indican que alrededor de 805 millones de personas en el mundo pasan hambre, y que la mitad de la población mundial está afectada por algún tipo de malnutrición.
En el texto acordado de la Declaración, los países «reconocen que la malnutrición en todas sus formas, incluidas la subalimentación, las deficiencias de micronutrientes, el sobrepeso y la obesidad, no sólo afecta a la salud y el bienestar de la gente … sino que también supone una pesada carga en forma de consecuencias sociales y económicas negativas para individuos, familias, comunidades y Estados».
Además, se comprometen a erradicar el hambre y prevenir todas las formas de malnutrición en todo el mundo y aumentar las inversiones para intervenciones y acciones efectivas para mejorar la alimentación y nutrición de las personas.
La Declaración afirma que «la pobreza, el subdesarrollo y el bajo nivel socioeconómico son los principales contribuyentes a la malnutrición, tanto en las zonas rurales como urbanas».
La responsabilidad principal es de los gobiernos
En el Marco de Acción, los países miembros reconocen que «ya que los gobiernos tienen la responsabilidad primordial de la adopción de medidas a nivel nacional, dialogando con una amplia gama de partes interesadas, incluidas las comunidades afectadas, las recomendaciones están dirigidas principalmente a los líderes gubernamentales».
Las recomendaciones incluyen el desarrollo y la implementación de planes y políticas nacionales para mejorar la nutrición, así como el aumento de las inversiones relacionadas, incluyendo la Asistencia Oficial al Desarrollo (AOD).
Esto requiere también mejorar la producción agrícola sostenible en formas que garanticen la seguridad alimentaria y que las personas puedan tener acceso a una alimentación sana.
Se espera que la CIN2 cuente con la presencia de Jefes de Estado y de Gobierno, junto con otros dignatarios y líderes. El Papa Francisco ya ha confirmado su participación.