El mercado de la energía solar de Tailandia estaba estancado en 2008. La energía solar representaba menos de 2 megavatios (MW) de la capacidad instalada. (i) Sin embargo, los costos de la tecnología estaban bajando, y el Gobierno estaba implementando incentivos para quienes desarrollaran energía renovable. Wandee Khunchornyakong, una ejecutiva jubilada de la industria de la fabricación de paneles solares, vio una oportunidad donde otros no la vieron.
Ella quería ayudar a reducir la dependencia de Tailandia de la energía importada, y creía que podría estimular el crecimiento económico en una de las regiones más empobrecidas del país construyendo al mismo tiempo granjas de energía solar a escala comercial. El financiamiento de la Corporación Financiera Internacional (IFC) del Grupo Banco Mundial le dio a su empresa Solar Power Company Group (SPCG) el impulso que necesitaba para atraer a los inversionistas a un terreno no probado hasta ese entonces en Tailandia.
Seis años después y con una generación de 250 MW de capacidad solar, Wandee y SPCG fueron reconocidas por la Secretaría de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) con el prestigioso premio de la iniciativa Impulso para el Cambio en la categoría “Mujeres por resultados”, (i) que forma parte de las Lighthouse Activities (Actividades inspiradoras), (i) que son proyectos de todo el mundo que abordan el cambio climático así como también desafíos económicos, sociales y ambientales más amplios.
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